SATURA LIBERTAD – Tiempos difíciles

 

Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto para el Reino de Dios.… Dijo Jesús. Dios nos llama a ser hombres y mujeres de verdad, que es parecerse a Cristo. Su llamado no es para que consideremos nuestra vida importante, sino para que consideremos que Jesús vale más que la vida misma.

Un Pastor amigo me envió una copia del siguiente compromiso que leyó en algún libro. Dice que muchos reclaman su autoría, pero no importa, yo les animo a que hagamos el nuestro, no poniendo nuestro nombre, sino que nos inspiremos en un desafío que aliente nuestra vida cada día:

“Soy parte del grupo de los que <no miran hacia atrás>. La decisión ha sido tomada. Ya crucé la línea. No voy a mirar atrás, ni ceder ni aminorar, ni volverme ni callarme.

Mi pasado está redimido, mi presente tiene sentido y mi futuro es seguro. He decidido terminar con mi vida baja, mi caminar por vista, mis planes limitados, mis rodillas suaves, mis sueños incoloros, mis visiones dóciles, mi hablar mundano, mi dar insignificante y mis metas pequeñas. Yo no necesito preeminencia, prosperidad, posición, ni ser promovido, ni aplausos ni popularidad. No tengo que tener la razón ni ser el primero, ni el superior ni el reconocido, ni el alabado, ni el respetado ni el premiado. Ahora vivo por fe, me apoyo en Su Presencia, amo con paciencia, vivo por la oración y trabajo con poder.

Mi rostro es firme, mi paso rápido, mi meta es el Cielo, mi camino es angosto y difícil, mis acompañantes son pocos, mi Guía es confiable, y mi misión es clara. No me puedo vender, ni tranzar, ni desviar, ni nada me puede ahuyentar, ni hacer volver atrás, ni engañar ni retrasar. No me voy a acobardar frente al sacrificio, ni voy a dudar en presencia de la adversidad, no me voy a sentar a negociar con el enemigo, no voy a detenerme a considerar mi popularidad ni voy a serpentear en el laberinto de la mediocridad.

No voy a desistir, callar, aflojar ni reducir el paso sino hasta que haya terminado mi trabajo diario por la causa de Cristo. Soy un discípulo de Jesús. Debo perseverar hasta que Él venga, hasta caer agotado, predicar hasta que todos hayan escuchado y trabajar hasta que Él me diga basta. Y cuando Él venga por los suyos, Él no tendrá problema en reconocerme.”

En Satura Naciones nuestro lema es claro en estos tiempos difíciles, somos parte del grupo de los que “no miran hacia atrás”

 

Carlos Yomayusa M

Satura Colombia

Bogotá.